La angustia me asfixia
apretando con toda su fuerza
mi desolada alma.
Necesito un grito ancestral,
un llanto desconsolado,
el desangrado de mis venas.
La mente que se nubla ante
las sombras del desquicio
que asechan todos mis días.
Quiero ese tiempo nuestro,
ese maravilloso universo en que
solo somos vos y yo, y nadie más.
Estas eternidades en que no estás
me encuentran desojando los minutos,
y repitiéndole tu nombre al viento.
(Quizás no sea buena la poesía. Pero eran éstas letras o las lágrimas de la poeta).
23 dic 2007
°o.O POEMA XI O.o°
1:55 a. m.
1 comment
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1 Huellas en el Valle:
Por encima de la calidad o no del poema, que en mi opinión la tiene, son unos versos que destilan un sentimiento desgarrador, lo que le da una fuerza impresionante.
Felicidades, y felices fiestas.
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