30 sept 2005

ºo.O CALLEJONES DE SOLEDAD O.oº

Camino sola por calles que ya caminé, pero siempre se siente como la primera vez. Mi paso es aletargado, la oscuridad y las sombras son mi única compañía. Respiro profundo, la brisa de la noche, me envuelve en su regazo empapando todo mi ser. Sólo persiste una leve claridad gracias a la Luna, que devela el manto lúgubre que me cubre al pasar por allí.
Un amargo sentimiento de soledad y angustia se apodera de mí, pienso... ¿la nostalgia por ese amor que se ha ido, hace que éste sabor sea aún más amargo? Es probable.
El recuerdo, la persistente memoria que me acompaña incansable a lo largo de mi andar, me lo hacen sospechar. Las huellas que tras de mi se petrifican al contacto con este espeso rocío, son testigo de mis varias andanzas por los callejones de la desidia y la desolación.

ºo.O UN SEGUNDO O.oº




Un segundo, sólo un segundo necesito
para demostrarte cuando te amo.
Un segundo, de sesenta que cada minuto
desperdiciamos en cosas banales.
Porque a las palabras se las lleva el viento,
porque lo que perdura es ése momento.
Sólo un segundo, para que sientas
lo que yo siento, tan sólo un segundo,
que mutará en una eternidad.
Un segundo, que invita a saborear
el néctar de éste maravilloso elixir.
No necesito más.
Porque todo está en ese segundo,
el instante en que nuestros labios
se trenzan, se funden y se hacen uno.